Descanso de exámenes y evaluaciones, y en las proximidades de las vacaciones, es momento de pasear por la ciudad, por el campo, incluso por la playa, cámara en mano, para buscar las instantáneas más sorprendentes… o no.
También en lo cotidiano podemos encontrar objetos y fenómenos que observar y analizar a un ritmo más sosegado, ahora que disponemos de más tiempo libre, con ojos científicos.
Seguro que surgen muchísimas preguntas que nos invitan a la investigación.
Podemos observar la propagación rectilínea de los rayos:
¿Por qué el cielo es azul? ¿Por qué las nubes son blancas? ¿y grises?
Con un poco de «mala suerte«, podemos comprobar cómo el humo asciende. Pero, ¿alguna vez te has preguntado el porqué?
Si el aire está en reposo, sin viento, el humo asciende verticalmente, ¿por qué?
¿El color de las cosas depende de la luz con que las ilumines?
Partículas en suspensión. Todo se ve de otro color.
Seguro que encontramos cientos de cosas que nos provocan fascinación.
¿Qué me sugiere esta fotografía?. Fotografía: Eugenia Maestro.
¡Espero que nos cuentes a la vuelta cómo te ha ido tu safari fotográfico!